"Tengo hablado el flete para irnos de acá hoy mismo (por ayer) porque no quiero vivir más en esta casa… la voy a vender porque este barrio es un desastre’. Con lágrimas en los ojos y al borde de quebrarse, así contaba Cecilia Leites (empleada de comercio) la drástica decisión que tomó: abandonar la vivienda que durante 5 años habitó con su marido y sus dos hijos en el Bº Buenos Aires, en inmediaciones de Benavídez y Ruta 40, Chimbas. Es que ladrones aprovecharon que la familia se ausentó por varias horas y entraron por una puerta lateral para llevarse de todo. Joyas, ropa, calzados, un horno eléctrico, las 2 bicicletas de los niños, un triciclo infantil, un equipo de música, una planchita para alisar cabello, una computadora completa, un DVD, una bucleadora, relojes, mercadería, carne y hasta una moto 110cc., fueron parte del botín, estimado por Leites en unos 30.000 pesos.
El "escruche" (robo en ausencia de moradores) ocurrió entre la siesta del jueves y la madrugada de ayer en la casa que habita Leites desde hace 5 años en calle Esmeralda 4.663 Este, Chimbas. Esa vivienda la heredó de sus abuelos y la comparte con su esposo Marcelo Molina y sus chicos, de 5 y 2 años.
El jueves en la siesta, la familia se fue a la casa de la madre de Leites en el Bº Aramburu, Rivadavia. Ayer, alrededor de las 5.30, un vecino pasó por la puerta de esa vivienda de calle Esmeralda y descubrió el robo.
Leites llegó 15 minutos después y se topó con una puerta metálica lateral abierta y en el piso, un televisor que abandonaron los malvivientes. Unos metros más atrás de ese corredor, también dejaron un cochecito para bebés y una conservadora.
Al entrar encontró todo revuelto. Los ladrones ingresaron tras romper la puerta de la cocina y de allí sacaron la moto y mercadería. De la heladera sacaron algo de carne. Luego, los delincuentes revisaron el dormitorio matrimonial y de allí se llevaron alhajas, algunos aparatos y ropa. De la pieza de los niños se sustrajeron toda la ropa de invierno. Lo extraño es que ningún vecino dijo escuchar ni ver nada raro en la vivienda, contó Leites.
"Calculo que las pérdidas llegan a los 30.000 pesos… no nos dejaron nada. Doy gracias que no pudieron abrir una puerta de reja del frente, sino me llevaban hasta los muebles. Algunos vecinos dicen que han visto como a 6 tipos dando vueltas anoche (por el jueves)", precisó Leites. Y agregó: "no tengo esperanzas de que la policía logre recuperar algo de lo que me robaron. Esto duele bastante porque hicimos mucho sacrificio para adquirir nuestras cosas".

