Un joven militar de 23 años que trabaja en San Luis, fue detenido por policías del Comando Radioeléctrico en la mañana de ayer en la Villa Timoteo Maradona, Capital, sospechado de ser uno de los tres sujetos que participaron de una pelea que terminó a las pedradas y dejó un saldo dañino: un niño de 11 años con un corte en la cabeza, el parabrisas de un auto roto, y daños en la puerta y la ventana de la casa de una vecina. Al chico debieron hacerle tres puntos pero está fuera de peligro, dijeron ayer fuentes policiales.

El sospechoso, identificado por su apellido Frías, estaba ayer detenido en la Comisaría 27ma. del barrio Aramburu, Rivadavia, a cargo del subcomisario Hugo Velárdez.