Un funcionario del Ministerio de Salud de San Luis fue encontrado asesinado ayer en su casa de la capital puntana, atado de pies y manos y amordazado. Anoche, el médico forense concluyó que recibió algunos golpes y que murió asfixiado por la mordaza que obstruyó su nariz y su boca, informó El Diario de la República en su edición digital.
En la policía se inclinaban ayer a descartar que Antonio Ferrara (45 años, jefe del Programa HIV SIDA de la provincia) hubiera sido asesinado durante un robo, porque a pesar de encontrar su casa en completo desorden también detectaron que había varias cosas de valor que no se habían llevado. Así, la hipótesis con más fuerza ayer era la de un crimen cometido por alguien conocido o del entorno de la víctima.
Ferrera fue hallado alrededor de las 9 de ayer en su casa del barrio Lucas Rodríguez. Llegaron hasta él por una vecina a la que le pareció extraño ver la puerta de rejas de ingreso entreabierta y la puerta de la vivienda sin llave. El funcionario provincial estaba "vestido, maniatado de pies y manos y amordazado en una de las habitaciones de su casa", precisaron fuentes del caso.
Tras el hallazgo del cuerpo, llegaron al lugar la jueza del crimen Mirtha Esley, su secretario judicial Martín Jofré y el médico forense Jorge Giboín, cuyo examen del cadáver fue clave para determinar la causa de muerte. Anoche, no se descartaban detenciones de personas ligadas al entorno del funcionario.