No era cualquier trámite. El pagar una boleta de servicio y el cobrar el sueldo es cosa seria para un jubilado. Y así lo entendía Héctor Andrés Pérez, que ayer de mañana antes del amanecer salió en su bicicleta a la ruta 40 con la idea de ir a Media Agua a cumplir sus compromisos. Sin embargo, apenas se acomodó y cruzó de carril, el viejo solterón salió despedido por el aire. Un vehículo que venía por el mismo sentido lo embistió de atrás y lo mató. El automovilista ni se detuvo, de hecho escapó y hasta anoche la policía lo buscaba.
Los testigos mudos de la tragedia de ayer aproximadamente a las 7:30 era el cadáver de Héctor Andrés Pérez, de 67 años, que permanecía en la banquina Oeste de la ruta, indicaron fuentes de la Seccional 8va. También una de sus zapatillas, su bicicleta destrozada, una rueda separada del cuadro con la marca del choque, y su asiento que fue a parar a la otra banquina. Sólo unos trozos de plástico gris del paragolpe, algunos vidrios del parabrisas y unos pequeños pedazos de mica, señalaban los únicos indicios y evidencia de ese vehículo desconocido que atropelló a este jubilado sobre la ruta 40, a metros de la calle llamada Mendoza Vieja, en el distrito de Colonia Fiscal Norte.
Estaba de noche cuando Pérez dejó su casa en el Lote Hogar 47 de ese poblado sarmientino. Él era un obrero rural ya jubilado que vivía solo. Según sus familiares, acostumbraba a despertarse temprano. Ayer, al parecer aprovechó eso para partir a primera hora de la mañana en su bicicleta, con la intensión de cobrar y pagar la boleta de la luz en la villa cabecera del departamento, dijeron.
De acuerdo a lo que reconstruyeron los policías, el jubilado salió del lado Este por calle Mendoza Vieja para entrar a la ruta 40 y ahí se cruzó de carril para enfilar rumbo al Sur. A partir de las huellas, todo indica que apenas recorrió 5 metros por la ruta y fue atropellado de atrás. Aparentemente, el ciclista golpeó su cuerpo contra el parabrisas. En su gorra tenía pequeños trozos de vidrio, dijo un policía. Y después fue lanzado o arrastrado alrededor de 54 metros hasta que terminó tirado en la banquina, explicó un investigador. El vehículo frenó tras el impacto, pero luego escapó. Los rastros hacen pensar que es un auto o una camioneta, modelo nuevo y color gris, dijo un jefe policial. Los policías de la Seccional 8va. no podían aseverar de qué vehículo se trataba. Lo que sí dijeron era que tenía dañado el paragolpe y el parabrisas. Especulaban que el rodado posiblemente no salió de la provincia, dado que a los minutos de sucedido el accidente dieron el alerta en los controles interprovinciales. La policía anoche buscaba pistas y testigos, mientras tanto Martín Lencina -sobrino de la víctima- ofreció una recompensa de 1.500 pesos para quien aporte datos certeros del vehículo fugado.

