La víctima, identificada como Julio Arias, de 96 años de edad, falleció luego de que delincuentes lo maniataran y le dieran una tremenda golpiza. Su esposa tiene 80 años de edad y observó cómo el hombre que la acompañó toda su vida, moría lentamente.

Los ladrones no tuvieron piedad con ninguno de los tres habitantes de la casa de Rosales, casi Talcahuano, del barrio El Progreso, ubicado a unos cinco kilómetros del centro de la ciudad de La Plata, en la provincia de Buenos Aires.

Fue pasadas las 8 cuando, según las fuentes del caso, los delincuentes “saltaron la medianera del fondo y esperaron en el patio a que abrieran la puerta, en ese instante entraron a la casa”, y sorprendieron a la pareja de ancianos y a su nieta, de 35 años, según relataron fuentes policiales al diario Clarín. A la vivienda ingresaron tres ladrones, según estimaron en la Policía bonaerense.