La Policía de Córdoba metió presa por no usar tapabocas en la calle a una joven, a quien luego desnudó en la comisaría. El lamentable episodio ocurrió el último lunes en la mencionada provincia pero trasendió recién ayer.
Jimena, la protagonista de la historia, brindó detalles este jueves acerca de cómo fue hostigada por los uniformados. "Primero, quiero aclarar que donde yo vivo, es ciudad de 40 mil habitantes", comenzó diciendo la mujer.
"Acá no estamos en cuarentena, no necesitamos permiso para salir a la calle, puedo ir a los bares a tomar algo, podés salir a correr. Prácticamente hacemos vida normal, hasta donde yo tenía entendido no es obligatorio el uso de barbijo en la calle o por lo menos acá nos manejamos todos los ciudadanos sin barbijo si vamos caminando solos", comentó a un medio nacional.
Era la 1 de la tarde cuando la joven salía de su trabajo y se dio cuenta que un oficial estaba llamándole la atención. "Nunca escuché que a alguien lo frenaran para decirle que se ponga el barbijo ni nada por el estilo", afirmó.
Y precisó: "Cuando llego a la esquina del trabajo, que está en el centro de la ciudad, donde hay un banco, desde ahí un policía me grita ‘¡señora póngase el barbijo!, yo venía con el celular y en el momento no me di cuenta que era para mí".
"Entonces yo seguí caminando y me frena media cuadra más adelante y me dice ‘póngase el barbijo’. Yo lo busco en mi mochila y ahí me doy cuenta que me lo había olvidado. Y le dije ‘mirá, me lo olvidé en trabajo’, que estaba a una cuadra de acá", relató Jimena.
"Me dijo que me tenía que poner el barbijo porque era obligatorio y me pidió mis datos. Yo le pregunté para qué los quería y no me supo responder. Era alguien que se ve que me conocía, porque acá nos conocemos entre todos. Hace tres años que trabajo acá en el centro y son siempre los mismos policías", sostuvo.
Pese al pedido del oficial, la joven remarcó que el hombre no le dio la posibilidad de regresar al trabajo para buscar su tapabocas.
Perseguida por la Policía
"Cuando él no me dice para qué quería mis datos, le digo ‘bueno si no me decís para qué querés mis datos no te los voy a dar’", recordó, al tiempo que enfatizó: "Justamente para no tener problemas con la Policía, salí caminando".
No obstante, el agente de seguridad la persiguió por dos cuadras y llamó a otros oficiales para que lo ayuden a capturarla. "Cuando escucho eso me asusto, llamo a mi hermana que trabaja en la municipalidad y le digo ‘Sofi, por favor, salí que me está por agarrar la Policía’".
Jimena señaló que en el momento en que llegó a la esquina de la plaza, dos patrulleros más el uniformado que venía caminando detrás suyo la agredieron. "Me empezaron a tratar mal y, cómo tenía el celular en la mano, dije ‘bueno, todo esto díganlo para la cámara’", y fue ahí cuando una policía mujer se alteró y dijo "llévensela".
La joven contó que la agarraron, la pusieron contra la pared, la esposaron y justo allí arribó su hermana, quien corriendo con un barbijo en la mano les pidió a los oficiales que la dejaran ir. Sin embargo, los policías se negaron ya que "los había desobedecido", por lo que decidieron detenerla.