Para la Fiscalía hay certeza. Para la defensa, dudas. Un tribunal será el encargado de decidir si un albañil de 25 años debe o no ser condenado por haber cometido delitos gravísimos: haber violado a su propia hija de 4 años y haberle contagiado una enfermedad de transmisión sexual. Ayer, el fiscal Eduardo Gallastegui y la ayudante fiscal Gabriela Blanco (UFI Anivi), enumeraron las pruebas que, en su opinión, acreditan que ese joven atacó sexualmente a su propia hija y que, por lo tanto, debe ser condenado a 14 años.

Sin embargo Pablo Ávila, defensor de ese albañil (no mencionado para preservar a su hija), relativizó cada una de las evidencias de Fiscalía y pidió la absolución.

El caso había sido denunciado el 4 de marzo pasado por la madre de la niña, una joven que había mantenido una relación de 6 años con el sospechoso, con períodos de convivencia y separación, dijeron fuentes judiciales.

La versión de esa joven, la de una psicóloga particular que abordó a la menor por sus problemas de conducta y sobre todo la de la psicóloga que entrevistó a la niña en el Anivi, representan para Fiscalía pruebas que confirman la existencia de los ataques sexuales, porque atestiguan el relato de la menor. Para una de las profesionales, además, hubo elementos no verbales como, la ‘ansiedad’ demostrada por la menor cada vez que le hablaban de su papá y ‘los juegos sexualizados’ con muñecos, que evidencian que atravesó una situación sexual traumática.

La prueba médica es clave también para la Fiscalía, pues una profesional que revisó a la nena informó sobre un desgarro parcial en sus genitales y sobre la presencia de herpes, llagas en la piel que provocan dolor y se originan, principalmente, por el contacto sexual, indicaron las fuentes. El padre quedó complicado porque admitió haber sufrido esa enfermedad.

El defensor, en cambio, relativizó esas pruebas. Ayer, aseguró que la médica no habló de una certeza del contagio por vía sexual, pues la madre había reconocido que sufrió herpes cuando nació su hija. Y que las lesiones genitales no tuvieron exclusivamente origen en un ataque sexual, pues esa profesional había admitido que pudieron tener otra causa. Además, dijo que la psicóloga pudo haber estado influenciada por el relato de la madre cuando describió de indicadores de abuso sexual en la nena.

Hoy, los jueces Diego Manuel Sanz, Verónica Chicón y Celia Maldonado decidirán si declaran o no culpable al albañil. Si lo absuelven, quedará a un paso de ser desligado. Si no, las partes alegarán sobre el monto de la pena y entonces lo más probable es que pierda su libertad y vaya a la cárcel.