En el final, los sospechosos lloraron. En sus últimas palabras ante el juez, la madre la chica (hoy de 18 años), dijo que nunca la descuidó y que pedía a Dios por ella… que su actual pareja no la golpee y la cuide. A su turno, también entre lágrimas, su marido oficial inspector de Policía (ambos tienen 40 años) le dijo al juez: "Yo la quiero como a mi hija y la perdono por todo lo que ha dicho y ha hecho. Le pido a Dios que la proteja… siempre buscamos el bien para ella y sus hermanos". Ambos esperaban otra salida, acorde con el pedido de "absolución lisa y llana" de sus defensores Ivana Salas y Gustavo de la Fuente, para quien no se cometió delito sexual alguno, pues el informe médico no reveló la existencia de lesiones. Además, pidió investigar por presunto abuso al novio de la joven y también a su madre, "por manipuladora".
Pero la decisión del juez Martín Heredia Zaldo (Sala I, Cámara Penal) se ajustó a lo solicitado por la fiscal Marcela Torres. Así, condenó al policía a 21 años (la fiscal pidió 22) por los abusos gravemente ultrajantes y al menos tres violaciones agravadas contra su hijastra (entre los 13 y los 16 años). Y le dio 9 años de prisión a la madre de la niña (Fiscalía pidió 10), a quien ordenó apresar por considerarla partícipe (por omitir denunciar) en los delitos del policía.
El caso había llegado a la Justicia en 2019, cuando la chica llegó por segunda vez a la Cámara Gesell a decir su verdad, pues en la entrevista con ese sistema mintió y se retractó, presionada a golpes y amenazas por su madre, quien se encargó de hacer desaparecer el celular donde tenía mensajes y fotos íntimas que le mandaba el policía. De todos modos, para la Fiscalía esa prueba sobrevivió en las capturas de pantalla que hizo el novio de esa chica, que desde niña sufre ataques convulsivos por epilepsia.
Así, el juez dio crédito al relato de esa niña, evaluado como creíble por varios psicólogos. La chica dijo que comenzó a ser manoseada a los 13 años. Que su padrastro la violó por primera vez cuando tuvo 14 y que lo hizo un par de veces más hasta que ella se fue de la casa.
Ahora, los defensores podrán pedir la revisión del fallo en la Corte de Justicia.