La empleada de una empresa fue ayer blanco de otra salidera bancaria perpetrada por motochorros. El robo fue por demás violento. Uno de los ladrones agarró a golpes y le pisó la cabeza a la mujer en una calle céntrica, para arrebatarle la cartera con sus pertenencias y los 8.000 pesos que acababa de retirar de un banco.
Las secuelas del feroz ataque quedaron marcadas en el cuerpo de Gladys Miriam Valenzuela (53), que terminó con el ojo izquierdo morado e hinchado, además de sufrir raspones en los brazos y piernas. La mujer es empleada administrativa de la firma Rodacel, que fabrica sidras, y habitualmente sale a hacer trámites. Como ayer a las 11:15, cuando fue a retirar 8.000 pesos del banco Credicoop en la céntrica esquina de Mitre y Mendoza. Se sospecha que ahí alguien pudo "marcarla", pero no la atacaron porque estaba en una zona llena de gente.
De hecho, Valenzuela salió de esa entidad y fue hasta el Banco Nación a hacer otro trámite. Al salir de ese lugar, anduvo a pie por el microcentro hasta que enfiló por Brasil al Norte para dirigirse a la empresa para la que trabaja, en calle Belgrano cerca de Santiago del Estero.
Cuando caminaba a eso de las 12:20 por calle Brasil, entre Catamarca y Sarmiento, la sorprendieron. "Escuché como una corrida y un tipo se me apareció por detrás", relató Gladys Valenzuela. Es decir que los asaltantes venían siguiéndola, incluso se metieron con la moto en contramano por esa arteria. Uno bajó del rodado, directamente a emboscarla.
Valenzuela recordó cómo fueron esos instantes: "El hombre me agarró la cartera, pero no la solté. Me empujó y fui contra la pared o la reja de una casa. Yo hacía fuerza para que no me quitara las cosas, pero me tiró al piso. Después vi la sombra de un pie. Ahí me pisó la cabeza y me sacó la cartera". La mujer quedó tendida y lastimada en la vereda Sur de calle Brasil, mientras el delincuente subió a la moto de su cómplice y escaparon con la cartera, que contenía los 8.000 pesos de la empresa, otros 40 de ella, documentos personales y llaves. Gladys no pudo verle la cara al asaltante porque llevaba casco negro. Su cómplice también se cubría el rostro. Unos niños aseguraron que andaban en una moto Yamaha roja, que podría ser 200cc., contó el jefe de Valenzuela.