La autopsia practicada al cuerpo de Yamila Gutiérrez (27), la embarazada fallecida ayer tras chocar en Libertador y Caseros, determinó que murió por un shock cardiogénico postraumático, dijeron fuentes judiciales.
Por el hecho se encuentra detenida la conductora del otro auto, Suzanne Torres (45), a quien en las próximas horas le imputarán formalmente el delito de homicidio culposo (matar sin intención).
En esa primera audiencia, que podría ser mañana jueves, la acusada tendrá la posibilidad de declarar ante un juez de Garantías. Puede optar por no hacerlo, atendiendo a la recomendación del defensor que designe.
Lo más probable es que en esa audiencia se resuelva la excarcelación de Torres, teniendo en cuenta el delito que le van a endilgar. No obstante, si el fiscal Renato Roca (UFI Delitos Especiales) lo cree pertinente, puede pedir prisión preventiva para la mujer y entonces deberá definir el juez.
Todo pasó sobre las 11 de ayer. A esa hora Yamila Gutiérrez circulaba con su nena de 8 años (está fuera de peligro) en un Fiat Siena de Este a Oeste por Libertador, cuando fue embestida en su costado izquierdo por el Ford Fiesta que Suzanne Torres guiaba hacia el Norte por Caseros.
Gutiérrez terminó estrellándose con su auto en un árbol. Y a pesar de la violencia del choque pudo bajarse, muy molesta porque tenía prioridad de paso. Lo inesperado ocurrió después, pues la joven embarazada se descompensó y a pesar de que instantes después pudo ser trasladada al hospital Rawson, allí los médicos nada pudieron hacer para salvarla. De todos modos, sí pudieron rescatar a su bebé, que se encuentra internado en Neo.
La conductora que, a priori, tuvo la culpa en el violento accidente, permanece detenida en la seccional 3ra.
La cesárea estaba programada para hoy
El bebé de Yamila Gutiérrez, la fallecida, iba a nacer por una cesárea que estaba programada para hoy, pero la tragedia se interpuso. Ese fue uno de los tristes datos que revelaron ayer desde el círculo íntimo de la víctima. También contaron que se estaba por mudar junto a su pareja, padre del bebé, y que al auto en el que chocó se lo había regalado un hermano "para que no anduviera con su hija en el colectivo o en remís".
Yamila era la última de tres hermanos (única mujer) y vivía con su hija en la casa de sus padres (el hombre es el guitarrista "Quique" Gutiérrez), en el Barrio Roque Sáenz Peña, en Santa Lucía. "Era una chica buenísima, realmente excelente, y muy hermosa. Nació y se crió acá en el barrio. Los padres de ella están destruidos, no sé cómo van a poder seguir viviendo porque eran tan mimosos con ella. El barrio está igual de mal, por eso este silencio", comentó en la tarde de ayer Rosa, una vecina. Mientras que otra dijo que la víctima "estaba llena de vida, es terrible lo que pasó".
La chica ayer había salido a una consulta médica y a buscar a su hija a la escuela.