En las últimas horas, se conoció que por el crimen de Carlos Guillermo Crespillo (79) hay un nuevo detenido y se trata de un amigo del sobrino de la víctima que ya está involucrado en la causa.

Según fuentes confiables, fue aprehendido Luis Darío Endrizi, quien no sólo tiene un vínculo con uno de los principales sospechosos de la muerte de Crespillo sino que fue sorprendido con una prueba que lo complica. Aparentemente, Endrizi tenía en su poder la tarjeta SUBE del anciano que fue estrangulado.

Con él, ya son tres los detenidos en la causa que comenzó a investigarse el domingo con un llamado al 911 por parte de Maximiliano Roldán Crespillo, uno de los acusados junto a su pareja Yanet Núñez.

El hecho

Maximiliano Roldán Crespillo se contactó con la Policía alrededor de las 16 del domingo y por la noche quedó preso, igual que su pareja Yanet Nuñez, sospechados de tener alguna vinculación con un homicidio: todo indica que Carlos Guillermo Crespillo (79) fue estrangulado con un cinturón que hallaron enrollado en su cuello, con la hebilla hacia atrás, indicaron fuentes judiciales.

El sobrino y su esposa quedaron detenidos luego de que los médicos estimaran que el jubilado había perdido la vida entre 48 y 72 horas antes de que fuera encontrado en estado de putrefacción, y la pareja se contradijera sobre lo que habían hecho en ese tiempo, además de negar que hubieran escuchado algún ruido o haber visto algún movimiento extraño en la casa de su pariente situada en el 615 Este de la calle Oro, en Chimbas, precisaron.

Otra situación que también llevó a los pesquisas a sospechar del sobrino fue la situación económica no muy favorable que atraviesa para mantener a su familia (tiene 3 hijos). En contraposición con su tío, que tenía una jubilación y, además, obtenía otros ingresos por la venta de unos lotes, aseguraron.

El caso es investigado por el fiscal coordinador, Iván Grassi, con los ayudantes fiscales Victoria Martín, Maximiliano Gerarduzzi, Pablo Orellano y Fabricio Poblete y los policías de Delitos Especiales dirigidos por el comisario mayor Ángel González.