Sin trabajo. Lo que más le preocupa a Luberchi es que no puede trabajar. “Estaba en una obra. Me han dicho que van a esperarme, pero tengo tres meses para otra operación”, dijo.

 

“No llevaba ningún arma. Si no tengo ni una estrellita para tirar, soy un albañil que lo único que hizo fue defender a mi prima que la estaban golpeado. Después escapé de la Policía porque me asusté, no estaba armado”, aseguró Mauricio Rolando Luberchi, el muchacho de 26 años que recibió un balazo que le atravesó la cintura, y le dañó el intestino grueso, mientras era perseguido por una patrulla policial en La Bebida, Rivadavia. Si bien estaría fuera de peligro, tiene serias complicaciones: tuvieron que hacerle drenajes para que pueda orinar y defecar y estiman que tendrá que esperar tres meses hasta que lo puedan operar de nuevo.

Por ahora no hay ningún imputado. Fuentes del caso revelaron que el policía que supuestamente disparó sigue trabajando: declaró como testigo y le secuestraron el arma para peritarla. También tomó intervención la Subsecretaría de Control de Gestión para investigar el accionar policial, pero el expediente recién se inició.

Según Luberchi, su prima testificó que él no tenía armas y hay otros testigos.

El albañil aseguró que el domingo último en horas de la noche salió con su amigo en moto a comprar gaseosas por el cumpleaños de su hijo y llegó hasta el Bº Nuevo Cuyo, en La Bebida. Según él, pasó por la casa de su prima y vio que el novio la agredía. “Me paré a defenderla porque el novio la tenía del cuello y le pegaba. Le dije “qué es lo que te pasa”. Él reaccionó mal y nos insultamos. Y me largó hasta con una piedra. Después se fue y yo me fui a comprar. Al rato volví para ver a mi prima porque estaba mal. Ahí apareció este muchacho con los policías. No sé qué les habrá dicho, pero me asusté. No quería que me lleven preso ni me hagan una causa. Por eso me fui en la moto”, aseguró Luberchi. A las tres cuadras, lo encerraron con la patrulla y detuvieron al amigo del joven, pero éste continuó la marcha rumbo a su casa en el Bº Los Penitentes. “Escuché el disparo, pero no me di cuenta que estaba herido. Faltando una cuadra para mi casa, me desvanecí. Estaba todo mojado en sangre. Me hirieron de atrás. El disparo entró por la cintura y me fracturó un hueso”, relató.

Extraoficialmente, en la Policía dijo que el otro hombre, de apellido López, denunció que Luberchi lo había amenazado con un arma de fuego y a raíz de eso intervinieron, que luego lo persiguieron porque éste escapó a toda velocidad en la moto. Una fuente de la fuerza dijo que los policías habrían reconocido que hicieron disparos intimidatorios, pero no saben si lo hirieron o éste se baleó solo.