A las 8 de ayer murió Genoveva "Beba" Ríos (73), la mujer que había sufrido quemaduras en las piernas y parte del torso en un incidente con un tubo de oxígeno en el Hospital Marcial Quiroga, el pasado 15 de abril.
Tras el fallecimiento, desde el nosocomio aseguraron que en realidad la causa del deceso fue el accidente cerebrovascular (ACV) por el que había ingresado al hospital. No obstante, por orden judicial al cuerpo ayer le practicaban la autopsia en la Morgue Judicial para establecer con certeza qué ocurrió.
El incidente ocurrió a eso de las 12.40 del 15 de abril, mientras Ríos era trasladada en una camilla desde la Guardia hasta el sector de Terapia. Entre sus piernas llevaba un tubo de oxígeno que aparentemente tenía un escape o tenía algún problema que derivó en una repentina combustión cuyo origen se investiga.
Todo indica que el oxígeno, altamente inflamable, produjo una llamarada al entrar en contacto con alguna sustancia como alcohol, algún aditivo o incluso la misma vaselina de los guantes de látex, indicaron fuentes oficiales.
El fogonazo quemó gran parte de las piernas de Ríos, y también la zona genital y el torso, en menor medida. Desde entonces la mujer quedó internada en grave estado, sobretodo por su problema neurológico a causa del ACV, informaron desde el hospital. Y aguantó 8 días, pues en la mañana de ayer finalmente perdió la vida. El médico que la revisó detectó "signos de hipertensión endocraneana", según la versión oficial.
Pese a eso, el cadáver fue trasladado a la Morgue Judicial y las autoridades judiciales anoche esperaban el resultado de la autopsia para saber si cabe o no investigar la posible comisión de algún delito.
Paralelamente, desde el hospital Marcial Quiroga dijeron que se inició una investigación interna para establecer si una posible falla humana desencadenó el incidente. Las pericias de Bomberos también serán claves.