Las sospechas iniciales de lo más terrible se confirmaron: Alina Suárez, la nena de 2 años que el miércoles fue llevada por su mamá y su padrastro muy grave al hospital de Caucete, donde murió enseguida, pudo ser víctima de un crimen cometido por su entorno más íntimo. Según fuentes judiciales, la autopsia practicada anoche en el pequeño cadáver dio cuenta de que la causa de muerte fue un violento golpe en la cabeza, y que además presentaba otro estremecedor cuadro de lesiones, viejas y recientes, como fracturas en sus costillas, un riñón que la llevó a orinar sangre o golpes en la espalda, el pecho y otras partes del cuerpo.
Apenas se conoció ese resultado, el titular del Cuarto Juzgado de Instrucción, José Atenágoras Vega, convirtió en detención formal el simple arresto que había ordenado el miércoles contra la madre, de apellido Romero (22) y el padrastro de la nena, Agüero (29).
Ahora, ambos serán investigados por un delito gravísimo: el presunto homicidio agravado de la criatura, una maniobra que puede acarrearles uno de los más duros castigos, prisión o reclusión perpetua.
La sospecha de un homicidio parece tener sustento porque no encaja con la versión inicial que dieron a los investigadores policiales los padres de la nena.
¿Qué dijeron? Según las fuentes, la mujer dijo que la nena había sido violentamente empujada por su hermano de 6 años cuando estaba parada sobre una mesa, el miércoles alrededor de las 9. Que cuando cayó la criatura golpeó primero contra una silla metálica y luego en el piso. Que el problema no pasó a mayores y que la nena siguió su rutina diaria con normalidad, pero cuando se despertó de dormir la siesta la notó pálida, muy callada y con dificultades para respirar.
Que ante esos síntomas -explicaron las fuentes- la llevó con su pareja hasta el hospital alrededor de las 17. Que allí rogaron para que los atendieran y que esa atención se produjo cerca de las 18, cuando el médico les dijo que estaba sufriendo un paro cardiorespiratorio del que no pudieron recuperarla.
Ahora, el juez investigará a fondo para saber quién o quiénes pudieron ser los autores de esas lesiones, posibles golpizas que terminaron en un posible homicidio.
