Le decían ‘Mazorca’ a Emanuel Mayorga. Tenía 20 años y una vida complicada: no vivía con sus padres en Rawson, ocupaba una pieza con un colchón en el piso y algo de vestimenta en la habitación de una casa en construcción en Marconi y Mariano Moreno, en Trinidad, Capital, donde hacía base con frecuencia cuando terminaban sus jornadas de vender bolsas para residuos, casa por casa, según sus amigos. Los episodios con borracheras también eran habituales en este joven, dijeron sus vecinos. Y todo indica que uno de esos episodios, terminó ayer de la peor manera para Emanuel: fue encontrado asesinado en la habitación de una casa abandonada pegada al 939 Sur de Marconi, a menos de una cuadra del lugar donde vivía.
Fue un crimen impresionante el de Emanuel. En la Policía conjeturaban ayer que aplastaron y destrozaron su cabeza a golpes con un trozo de escombro. Y que también le produjeron tajos en su rostro, al parecer, con astillas de una caña. Según la Policía, además de las heridas, Emanuel, estaba todo revolcado, como si hubiese peleado. Voceros policiales aseguraron que lo hallaron dos jovencitos sobre las 10 de ayer, cuando se metieron a orinar en esa casa de adobes que alguien compró y nunca ocupó. Y que desde hace 3 años comenzó a ser desmantelada y ocupada para juntaderas nocturnas de todo tipo.
¿Quién pudo matarlo y por qué? Esos interrogantes pretendían ser develados ayer por policías de Homicidios y de la Seccional 3ra, donde ayer había 8 personas demoradas para atestiguar. Los pesquisas no descartaban que entre ellos estuviera el homicida.
Dos de los demorados son precisamente los jovencitos que dijeron haberlo encontrado, uno de los cuales también estaba revolcado y tenía un corte en la nariz que atribuyó -dijeron- a un intento de asalto en otra zona, precisaron fuentes policiales.
Los otros seis demorados son conocidos y amigos de la víctima que estuvieron con él en un cumpleaños que hubo a la vuelta del lugar del crimen, por Mariano Moreno. O que lo vieron en distintos momentos de la madrugada de ayer. Varios de los testigos habrían referido que Emanuel estaba ebrio y uno de ellos precisó que lo vio alrededor de las 5, y en la Policía especulan que a esa hora ocurrió el crimen.
El jefe de Policía, José Orlando Luna, y el juez de Instrucción Benito Ortiz, llegaron hasta la escena del crimen para dirigir la investigación.