La Policía halló en la tarde de ayer los cadáveres de Pyrhia Sarusi (63) y Lily Pereg (54), las dos hermanas israelíes que estaban desaparecidas desde el 12 de enero pasado en Mendoza. Los cuerpos estaban tapados con piedras y tierra en un pozo de unos 2 metros de profundidad, en la casa del hijo de una de las víctimas, identificado como Gil Pereg (37), sobre calle Julio Argentino Roca al 6.000, frente al cementerio municipal de Guaymallén. El sujeto, un exmilitar israelí que vivía como un indigente (ver recuadro), había sido detenido el viernes como el principal sospechoso.
Los pesquisas regresaron ayer a la vivienda del acusado, hijo de Sarusi, donde con máquinas excavadoras y perros de rastreo volvieron a revisar cada rincón del extenso terreno que ya habían allanado el viernes, cuando se habían encontrado manchas de sangre en una bolsa de cemento y en una remera que correspondían con el ADN de las mujeres.
Gil Pereg está imputado por homicidio agravado por el vínculo en concurso real (en el caso de su madre) y homicidio simple (por su tía). Un rato antes del hallazgo, había estado cara a cara con la fiscal del caso. "Si usted no me deja ir a mi casa a atender a mis gatos, va a encontrar un cuerpo", le dijo, amenazando con quitarse la vida.
Para desligarse de la investigación, Gil Pereg había acusado a sus vecinos y vinculado el caso a un hecho de inseguridad. "Estoy seguro de que alguien les hizo algo, porque no pueden desaparecer solas", decía antes de ser detenido.
Sarusi era funcionaria de un ente recaudador israelí y Pereg era profesora de microbiología en la Universidad de Nueva Inglaterra, en Australia. Llegaron a Mendoza el 11 de enero y al día siguiente cámaras de seguridad las captaron a las 9.30 junto a Gil Pereg abordando un micro en la capital provincial para dirigirse a la casa del hombre. A las 10.05, otras cámaras instaladas frente al domicilio del hombre registraron a los tres caminando por la zona. En su relato el imputado había asegurado que luego de permanecer varias horas en su vivienda, las mujeres se fueron solas a la parada del micro para regresar a un departamento céntrico que habían alquilado. Sin embargo, no hay registros de esa situación.
Tras el hallazgo, Gil Pereg fue trasladado al Complejo Penitenciario Boulogne Sur Mer.
El perfil del detenido, el exmilitar Gil Pereg
Gil Pereg llegó a Mendoza hace una década y se estableció bajo dos nombres falsos: Floda Reltih (Adolf Hitler, al revés) y luego Nicolás Gil. Es director de 5 empresas que su madre había radicado, pero no le iba bien en los negocios: el año pasado liberó 46 cheques sin fondos por más de $9.000.000. El sujeto tenía un arsenal de armas en su casa, todas registradas. Era conocido por los vecinos como ermitaño y sucio. Su vivienda carece de agua potable, electricidad, baño y cama, además de estar repleta de gatos y perros desnutridos (y otros disecados).