Una adolescente de 16 años fue encontrada muerta de un escopetazo en una vivienda del partido bonaerense de Campana, y se investiga si se trató de un femicidio cometido por su novio prófugo, informaron hoy fuentes policiales.
El hecho se registró el sábado último en una casa ubicada en la calle Barreto al 500, del barrio La Praderas del citado distrito situado a unos 80 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires.
Fuentes policiales informaron a Télam que un llamado al 911 alertó sobre una joven fallecida en el interior de una vivienda, por lo que el personal de la comisaría de Campana arribó al lugar de inmediato.
Al ingresar al inmueble, los efectivos constataron que la adolescente, identificada como Keila Moreyra, había fallecido de un escopetazo en la cabeza.
Según las fuentes, la chica estaba con su novio de 19 años y un amigo, quienes escaparon a bordo de un auto tras el hecho y hoy seguían siendo buscados por la Policía.
Antes de huir, el novio de Keila le confesó a su hermano que estaba manipulando el arma de fuego y accidentalmente la mató.
"A Keila la asesinó Franco Moreira, a Keila la asesinó el patriarcado. La asesinó el servicio local de Campana que no actuó a pesar de las denuncias que se habían hecho. La mató la desidia estatal", publicó en redes sociales un grupo feminista de Campana.
Sin embargo, voceros policiales negaron que haya habido denuncias previas por violencia de género en la comisaría de la mujer local.
El hecho es investigado por la fiscal Laura Basualdo, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2, del Departamento Judicial Zárate – Campana.
La funcionaria judicial dispuso una serie de medidas tendientes a dilucidar la mecánica del disparo y establecer si se trató de un accidente o si en realidad fue un femicidio.