Para la policía, el robo seguido de muerte de Luis Eduardo Pérez, el visitador médico médico de 73 años que fue hallado sin vida hace poco más de una semana en un domicilio de calle 25 de Mayo, en pleno centro, "está prácticamente resuelto", según dijo el jefe de Policía, Luis Martínez este sábado a la mañana en una conferencia de prensa que brindó en la Central.
La punta del ovillo de la investigación fue un remisero, que aparentemente en la noche del crimen hacía las veces de "campana". Ese vehículo fue la clave que llevó, tras al menos 6 allanamientos, a los otros tres sospechosos, todos con frondoso prontuario y con paso por el Penal de Chimbas.
Según precisaron, los detenidos son Gustavo Guajardo (27), y los hermanos Ávila, Pedro (24) y Maximiliano (20). En tanto que el remisero fue identificado como Sergio Delgado (27). Los tres primeros con antecedentes por delitos contra la propiedad, en tanto que el chofer no tendría, dijeron.
Entre los elementos secuestrados, había dos camperas y un televisor que pertenecían a Pérez. Aunque también investigan la procedencia de 6 relojes, un monitor de PC, una pava eléctrica, 13 teléfonos, una tablet, una tostadora, un caloventor y un tensiómetro, además de varias joyas. El dinero, que supuestamente faltaba en la casa de la víctima (se dijo en un principio que serían 10.000 pesos), no se halló.
A esto hay que sumarle dos barretas, una de ellas de poco más de 80 cm, y un cuchillo corto.
