Confirmado: los primeros resultados de las pericias para precisar el origen del fuego que en una clínica costó la vida de dos pacientes con alteraciones mentales, asfixiados en un baño al no poder salir de su habitación, ratificó que no hubo falla eléctrica y que todo se inició en un placard por la acción de una llama, informaron ayer fuentes ligadas a la investigación. Y esa primera revelación encaja con otro dato clave de la investigación: el hecho de que uno de los fallecidos tuviera en su poder un encendedor y cigarrillos, precisaron las fuentes.
Aunque el cotejo de esos dos hechos inclina a algunos pesquisas a pensar que quizá el fuego fue iniciado en forma intencional por una de las víctimas, para otros esa situación no está clara y tampoco descartan el inicio del incendio en forma accidental.
Esas dos pruebas serán analizadas por el juez Enrique de la Torre a la luz de otra evidencia fundamental: la pericia (aún sin concluir, según las fuentes) para explicar porqué no se abrió la puerta de la habitación donde estaban Vicente Vera (51) y Carlos Aguilera (29): ambos fallecieron intoxicados en el baño, donde supuestamente el más joven de los fallecidos se higienizaba cuando ocurrió el desastre, sin que pudieran ser auxiliados por personal de la clínica psiquiátrica donde estaban internados porque la puerta de la habitación se trabó por alguna razón.
La doble tragedia ocurrió alrededor de la 1.30 del martes último en la "Residencia Modelo" en San José 1983 Oeste, a metros de Casa de Gobierno. Y por ahora las evidencias ponen bajo la lupa la responsabilidad del personal de ese lugar, pues se supone que los pacientes debieron salir con normalidad de su habitación y no debían fumar o tener elementos para encender fuego, como el encendedor encontrado a uno de los fallecidos.
Al menos así lo ven las familias de ambas víctimas que ya salieron públicamente a tachar por lo menos de negligente el accionar de los empleados y, lo más grave, a decir que no pudieron escapar porque los tenían encerrados con llave.