Una condena de 5 años por robo en Córdoba, otra condena a 7 años por intentar matar a su padrastro en San Juan, hurtos, amenazas, lesiones graves, golpear a otra mujer, son algunos de los delitos que forman parte de la violenta y marginal vida de Cristian Oscar Fretes (34), el sujeto que el pasado sábado mató a golpes y cuchillazos delante de sus hijos a su concubina Estela del Valle Bustos (30, embarazada) en el Bº Las Alondras, Chimbas.

En 1994 y con 15 años, Fretes fue apresado por robo reiterado. Quedó libre y 4 años después lo detuvieron nuevamente. Fue en la localidad cordobesa de Cruz del Eje, por robo calificado. Algunos dicen que le clavó una lapicera en un ojo a un remisero en un asalto. Lo cierto es que por ese ataque la Cámara Penal Nº3 de Cruz del Eje lo condenó el 18 de junio de 1998 a 5 años de prisión, dijeron fuentes judiciales y policiales.

Luego, Cristian regresó a San Juan y con 21 años conoció a Estela del Valle Bustos (17), quien vivía con su madre Julia Carrizo y su padrastro Domingo Olmos en la Comuna San Miguel, Santa Lucía. Al principio parecía una relación normal, pero con el paso del tiempo se transformaría en una relación enfermiza, marcada por continuas golpizas hacia Estela y agresiones contra algunos miembros de su familia.

En 2001, Fretes comenzó a demostrar hasta dónde era capaz de llegar obsesionado por Estela. La familia Bustos comentó que ese año ella esperaba su primer hijo. Tenía entre 6 y 7 meses de embarazo cuando Cristian trató de pegarle, pero Andrés Nicolás Godoy, el padrastro de Fretes, la defendió. Lejos de deponer su actitud, el muchacho tomó un arma y le disparó al hombre 3 veces en las piernas. Uno de esos tiros lo dejó lisiado de por vida, indicaron. ‘Estaba obsesionado, no sé si eran celos o qué. Quería a Estela y se la llevaba de prepo de donde estuviera’, recordó Viviana, una de las hermanas de Bustos.

Tras ese ataque, la Policía llegó y Fretes se resistió a que lo detuvieran. Ese año quedó preso por amenazas con arma, lesiones graves y también por un hurto calificado, según registra su planilla prontuarial. El 28 de noviembre de 2003, la Sala 3 de la Cámara Penal lo condenó a 7 años y 8 meses de prisión por tentativa de homicidio y resistencia a la autoridad agravado por el uso de arma en perjuicio de su padrastro y la administración pública. Y como Fretes tenía condena en Córdoba, le dieron una pena unificada de 11 años, dijeron fuentes judiciales.

En 2006, le dieron salidas transitorias y en 2009, la libertad. El joven siguió viendo a Estela y quedó embarazada de su segundo hijo. Esa criatura sería blanco de la furia de Cristian. Viviana recuerda que fue un 28 de julio cuando Fretes se presentó en su casa de Villa Marini, Santa Lucía, buscando a la ‘Valle’. ‘Mi hermana le estaba dando la teta al niño y Cristian le dijo que parara porque estaba muy flaca. El niño siguió llorando y él lo agarró y lo tiró contra la pared. Se puso loco. Agarró 2 cuchillos, los metió en sus bolsillos y mi marido lo quiso tranquilizar, pero él le dio un puntazo en el abdomen. Mi hermana se escondió detrás de un mueble y Cristian se acuchilló las piernas para que saliera’, dijo Bustos. En otra ocasión, Cristian golpeó a su suegra enferma Julia Carrizo y a Estela, y lo denunciaron en la Comisaría 29na. ‘Ahí ella prometió dejarlo, pero no lo hizo’, dijo Olmos. En 2011, Fretes terminó preso por golpear a otra mujer, pero quedó libre por falta de mérito, dijeron fuentes judiciales.