El juez de Instrucción Leopoldo Zavalla Pringles ordenó que hoy exhumen el cuerpo de una chica de 15 años del cementerio de Albardón para realizarle una autopsia. La jovencita había muerto el lunes de la semana pasada por un cuadro infeccioso; antes de morir la habían operado en el hospital Rawson para extraerle su feto de 14 semanas de gestación, también fallecido, dijeron fuentes policiales y judiciales.
La idea del magistrado es que un médico forense le diga con precisión el origen de la infección. Una versión no confirmada habla de que la familia de la chica habría dicho que días antes de morir habían ido al hospital para consultar por un malestar que sentía, y que allí les habrían dicho que volvieran luego. Cuando lo hicieron -dijeron- ya era tarde.
Por esas presuntas declaraciones no se descarta que en el caso haya una supuesta mala praxis. Y ese mismo dato parece alejar otra teoría que fue desestimada por la misma familia: la de un aborto casero. Según la policía, tanto la chica como su familia querían tener a la criatura.
