El trámite de siempre de ir de una oficina a otra para traer la recaudación que luego retiraría un camión de caudales, se cumplió a medias ayer al mediodía para el encargado de una distribuidora en Capital: cuando estaba a punto de llegar a destino, en plena calle, un sujeto lo tiró al piso y lo golpeó para quitarle una caja en la que llevaba alrededor de un millón de pesos, dijeron ayer testigos del hecho y fuentes policiales.
Los investigadores policiales estaban convencidos ayer de que los delincuentes no atacaron al voleo y sí con información precisa que les proporcionó alguien que sabía cómo se producía esa operación.
Todo pasó cerca de las 12 en las afueras de un local de Rafael Moreno en calle Roselot, entre Alem y Catamarca, en Trinidad, Capital.
Según las fuentes, a esa hora el hombre salió de ese lugar y caminó hasta la esquina de Alem y Roselot, para retirar el dinero recaudado el fin de semana por la venta de cigarrillos.
Recorrió casi una cuadra y ya volvía con el dinero cuando uno de los delincuentes lo atacó antes de llegar. Durante el ataque, hubo un forcejeo y algunos golpes contra la víctima para que soltara la caja. Luego, el asaltante montó en una moto tipo 110 cc en la que lo esperaba un cómplice y huyeron por la calle Catamarca, indicaron.
"Lo tienen que haber llamado o por alguna razón salió a la calle y allí lo atacaron. Nosotros vimos cuando lo tenían en el piso, le quitaron la caja y se fueron en una moto tipo 110 cc", dijo ayer uno de los vecinos del lugar.
La información aportada por esos testigos y también los registros captados por cámaras de seguridad del propio local y las de la Policía, eran ayer elementos fundamentales para los pesquisas policiales que intentan esclarecer el caso.