Una mujer quebrada, embarazada de 7 meses y madre de 6 chicos (de entre 13 y 1 año) quedó con lo puesto luego de que un incendio afectara el módulo habitacional que habitaba con su familia en la Villa Cristo Pobre, Rawson. Encima, las llamas lastimaron al menor de los hijos de la damnificada y una vecinita cuando jugaban sobre una cucheta, informó Natalia Morales (29), la damnificada. Todo se habría iniciado por una falla eléctrica en un dormitorio.
La mala racha de Morales y su familia comenzó en febrero de 2014 cuando perdieron su precaria casa y sus cosas por las intensas lluvias. La joven y su familia empezaron de cero para equipar el módulo que les dieron. El 23 de julio pasado nuevamente la desgracia los golpeó: una automovilista chocó a Natalia y a uno de sus hijos, de 11 años, cuando circulaban en moto por Rawson. La conductora se fugó y como consecuencia del choque, la muchacha sufrió una quebradura en su pierna derecha y su nene quedó internado porque una herida en una de sus piernas se infectó y debieron hacerle un injerto de piel. Lo peor es que a la chica no pudieron operarla para arreglarle la fractura porque está embarazada y ahora se moviliza en una silla de ruedas. Por eso, algunas vecinas van a diario a darle una mano con los quehaceres de la casa.
Ayer a las 20, Morales estaba en la puerta de su hogar con una vecina mirando cómo la mayoría de sus hijos jugaban en la puerta. El nene de 1 año y otro de 6 de Natalia y la hija de 2 de la vecina estaban en una de las piezas cuando ocurrió el siniestro. ‘Mi marido estaba cuidando a nuestro hijo en el hospital. Mi hijo de 6 años salió gritando que había fuego y mi hijo mayor corrió a sacar los nenes. Fue todo muy rápido’, dijo la damnificada.