El cabo Julio Castro se cruzó de carril e impactó a una mujer en moto. Ayer se negó a dar su versión. Le atribuyen un homicidio culposo doblemente agravado, por ahora sigue preso.

 

El cabo de la Policía Julio Castro (30) se abstuvo ayer de dar su versión por videollamada ante el juez en lo Correccional Matías Parrón, quien le imputó el delito de homicidio culposo doblemente agravado: por manejar en estado de ebriedad y por conducción imprudente, dijeron fuentes judiciales. El siniestro que le atribuyen le costó la vida a Paola Albornoz (37 años, madre de cuatro hijos) sobre las 3 de la mañana del sábado pasado en plena Ruta 40, a la altura de Laprida, Albardón. Esa madrugada la mujer volvía a su casa en Campo Afuera en una moto Appia 110cc. El policía regresaba de Jáchal en un Chevrolet Agile, en completo estado de ebriedad: con una pipeta, le detectaron 1,86 gramos de alcohol por litro de sangre minutos después del accidente, y 0,90 cuatro horas después a través de un dosaje, indicaron. Su defensa pidió su excarcelación.