San Juan, 26 de agosto.- “Te están trabajando por la espalda”, o, “tené cuidado que hacen movimientos a espaldas tuyas”, o “quieren averiguar cómo está el niño”. Mensajes de estos aseguró haber recibido en su celular Gustavo Manrique, el padre de Emanuel, el chico atropellado en el Velódromo de Rawson por dos ciclistas, en circunstancias que aun no se determinan.

“No entiendo por qué pasa esto. Yo no me meto con nadie”, dijo Manrique. “Sinceramente no sé de dónde vienen los mensajes, ni sé por qué. De todas formas, ya le prohibí por una nota al director del hospital darle información de mi hijo a nadie, ni particulares, ni periodistas ni policía”, aseguró.

“Sobre el estado de salud de su hijo, repitió que “sigue grave. Si bien la operación fue un éxito, ha perdido masa encefálica y esto hace su situación muy delicada”.