Los dos chicos detenidos por el presunto homicidio de su amigo Ian Franco Goyeneche recuperaron su libertad en las últimas horas. El vuelco en la investigación surgió después de que la autopsia revelara que no murió por un golpe, como se creía, sino que sufrió un "paro cardiorespiratorio no traumático, aparentemente producto de una fuerte ingesta de drogas".
La víctima estaba "jugando" con los otros dos jóvenes en la zona de la pérgola del Parque Saavedra de La Platacuando se cayó y golpeó su cabeza contra un banco. En un principio, se creyó que esto habría sido lo que le causó la muerte. “Los amigos estaban genuinamente asustados y sorprendidos, uno decía ‘yo no lo toqué’, no entendían qué le había pasado”, dijeron los investigadores.
El joven, de 18 años, tenía en su poder marihuana y un "frasquito de color con una sustancia altamente tóxica conocida como ‘ Popper’ que suele ser inhalada". Si bien falta conocer el resultado de los estudios patológicos, todo apunta a que el adolescente murió por una sobredosis. Los especialistas señalaron que el Popper es una droga "psicoactiva que se inhala y produce en pocos minutos un estado de euforia, de excitación sexual, hipertensión, vasodilatación y relaja los esfínteres, y es altamente tóxica conjugada con otras drogas”.
El fiscal Marcelo Romero, a cargo de la causa, confirmó al sitio 0221 que ya fue descartada la hipótesis de un homicidio preterintencional o culposo por lo que los dos amigos de Goyeneche, de 18 y 29 años, fueron excarcelados anoche. En uno de sus últimos posteos en redes sociales, Ian casi se anticipó a la tragedia. "Quisiera saber si muero quién lloraría por mi", se preguntó.