"Será la forma de trabajar de ellos. Yo hubiera actuado de otra forma. Creo que hay una ética jerárquica, pero bueno, yo no puedo poner en tela de juicio la metodología de trabajo del jefe de la Región Cuyo", dijo ayer el jefe de Policía provincial, Miguel González, sobre la actuación de la Policía Federal, consultado sobre si el lunes le causó desazón que se enteraran por los medios y no por comunicación de la fuerza federal que habían apresado en Pocito a Carlos Albornoz, el único prófugo de la causa por presunta estafa con casas del IPV. Es que los altos jefes policiales se mostraron sorprendidos sobre el tema ante la prensa el lunes, al terminar el abrazo a la Circunvalación.
González dijo que ayer en una "reunión de rutina" con el ministro de Gobierno, Emilio Fernández se hizo una evaluación del tema de Albornoz y se le explicó que desde el 22 de abril este último tenía pedido de captura a través de convenio policial argentino, en el marco de un oficio del Juzgado de José Atenágoras Vega, donde intervienen las policías Provincial y Federal, Gendarmería y Aeronáutica. Que así, la Policía Federal tenía conocimiento del pedido de captura de Albornoz. Según González, ayer no hubo reproches desde el Ministerio para con las fuerzas provinciales: "el ministro está muy agradecido que lo hayan detenido", aseguró.
El jefe agregó que "lo que sí hemos hecho es un análisis es que hay una falta de concordancia entre lo que se manifiesta de que él vivió permanentemente en ese domicilio por cuanto nosotros tenemos constancia de que hemos efectuado un allanamiento en ese domicilio junto a veedor judicial y por orden del juez que entiende en la causa". En este punto, contradiciendo al propio Albornoz, quien al ser apresado manifestó que siempre estuvo en esa casa, según fuentes vinculadas al operativo.
González aseguró que inicialmente, mientras estaba la Policía local como instructor preliminar de la causa, hicieron sin éxito tres allanamientos, uno en el domicilio de Pocito donde finalmente fue capturado el lunes el prófugo, otro en un domicilio a 200 metros de este último y otro en un lugar cercano. "Y eso está todo documentado, el juez puede ratificarlo o rectificarlo".
Sobre si la Policía local tiene algún mea culpa que hacer, analizó que "yo creo que en esto el análisis es que hemos actuado todo en el marco legal y al no encontrarlo nosotros hemos pedido la colaboración como corresponde, lo podría haber encontrado la Federal, la de la Provincia de San Juan, Gendarmería…". Consultado sobre si fue entonces casualidad que la Federal diera con el prófugo, el jefe dijo que "yo no diría causalidad, yo no quiero entrar en eso, el juez tendrá los elementos necesarios para determinar si nuestro trabajo fue positivo o fue negativo". Y enfatizó sobre la tarea de las fuerzas federales que "yo no sé cómo ellos llegaron a esa información".
González hizo una especie de reivindicación sobre la performance de su fuerza asegurando que "esta causa tiene por lo menos mil fojas y de lo actuado por la Policía de San Juan en el sumario se han hecho cerca de 10 allanamientos, no sólo sobre Albornoz sino sobre todo el procedimiento policial, se han secuestrado vehículos, documentación, dinero, se han secuestrado comprobantes bancarios, y todo eso está en poder del juez".
¿Por qué la Policía Federal pudo encontrar a Albornoz y la Provincial no? El jefe respondió "¡y qué quiere que le diga! Nosotros hemos estado trabajando y para nosotros el allanamiento nos dio negativo".
Incluso, González dijo, consultado sobre si no hicieron recientemente las tareas de inteligencia que realizó la Federal previo a la detención, que "sí ha trabajado gente de Defraudaciones y Estafas, de acuerdo al análisis que se ha hecho con ellos, han estado trabajando y no lo lograban ubicar". Sobre si está satisfecho con lo actuado por la Policía provincial, el jefe se mostró cauto y dijo que "la investigación sigue".

