Una pareja y sus cuatro hijos atraviesan una dramática situación a raíz de un dañino incendio en su casa del Barrio Valle Grande, en Rawson.
El siniestro fue el último jueves y las víctimas todavía no logran al menos acomodarse en las cuestiones básicas: los niños no van a la escuela y los padres duermen con frío.
Eso contó Andrea Dómina (26), que con Jorge Aguirre (30) esperan su quinto hijo. Los otros son dos varones de 9 y 4 años, y dos nenas de 6 y 2. La joven embarazada explicó que ese jueves alrededor de las 14 estaba con sus hijos almorzando cuando observó que de una de las habitaciones salía "humo negro".
De inmediato sacó a los menores y pidió ayuda a los vecinos, pero lamentablemente lo único que lograron rescatar fue la mesa del comedor. Prácticamente todas las otras pertenencias fueron destruidas o arruinadas por el fuego.
Al parecer, el fuego se inició por un cortocircuito en el tablero de las llave térmica. Lo concreto es que el daño fue muy grande y la familia no logra reponerse.
"Los niños están repartidos en las casas de mis hermanos y no están yendo a la escuela, no tengo ni ropa para mandarlos", dijo Dómina con mucha angustia. Ella es ama de casa, mientras que su pareja es changarín. Los dos decidieron quedarse en la casa, por temor a ladrones y a usurpadores. El problema es que pasan frío y muchas necesidades, teniendo en cuenta que la vivienda no tiene vidrios (explotaron durante el incendio), sumado a la falta de electrodomésticos y muebles.
"No nos queda otra, ya nos han robado cuatro veces… la última, en el verano pasado, nos llevaron hasta las ollas. Es una situación muy difícil", se quejó la mujer. Agregó que recibieron donaciones pequeñas de los vecinos y el municipio, desde donde les prometieron una ayuda mayor que aún no llega.
Para colaborar con las víctimas, llamar al 2646114052.