Tranquilo. Así lo notaron a Daniel "Pitufo" Castro los pesquisas que ayer, por orden de la jueza de garantías Gema Guerrero, fueron a meterlo preso por un hecho grave: el presunto abuso sexual de un nene de 4 años con el que guarda algún parentesco, dijeron fuentes judiciales. Había sido la fiscal coordinadora de la UFI ANIVI, Valentina Bucchiarelli, quien pidió detener al famoso exciclista (llegó a competir en Europa) y actual director técnico del equipo de la Agrupación Virgen de Fátima, un día después de que la madre del menor lo denunciara, precisaron.
Por ahora no se determina qué tipo de maniobra sexual pudo cometerse contra el niño, aunque no se trataría de una violación, precisaron.
La denuncia contra Castro fue la consecuencia de varias situaciones bastante extrañas en el comportamiento del menor. Esas circunstancias fueron percibidas por la madre del niño y también por una psicóloga particular que está tratando al menor, indicaron.
Tras la denuncia, hubo un informe médico y se recolectaron otras pruebas que le sirvieron a la Fiscalía para pedir la detención de Castro de manera provisoria, para que no entorpezca el curso de la investigación.
Ahora se evaluará si el menor está o no en condiciones de ser abordado por una psicóloga en el ANIVI con el sistema de la Cámara Gesell. Si acaso el niño puede ser entrevistado, se podrá saber con un poco más de precisión qué tipo de maniobra delictiva pudo cometerse en su contra.
Esa medida de prueba es fundamental porque así el exciclista sabrá también si seguirá o no sospechado y, principalmente, si podrá o no recuperar su libertad, pues del eventual relato del menor se desprenderá la calificación delictiva, que es un punto clave en el proceso.