Un tribunal federal de La Plata condenó ayer Carlos "Pipi" Garzón a 29 años, 11 meses y 27 días de prisión, acusado por liderar la banda que en 2002 secuestró y ejecutó al adolescente Diego Peralta en el partido bonaerense de Esteban Echeverría. El adolescente desapareció el 5 de julio de ese año y lo hallaron asesinado el 12 de agosto. Junto a Garzón fueron juzgados otros miembros de la banda -ya condenados- precisamente por el robo del auto en que viajaba el chico, por lo que recibieron penas de entre 3 y 8 años de cárcel. Estos son Marcelo Cejas, Julio Rotella, David Pereyra, Rosita Pistillo, Enrique Báez, quienes en el 2008 ya habían sido sentenciados a perpetua por el secuestro y asesinato del menor de 17 años. Aquella vez, también sentenciaron a 10 años de prisión a Lauro Shimabukuru y a 5 años José Pablo García.
