José Aranda (52), empresario y exproveedor del Estado condenado por violación y robo y también por tener ilegalmente armas en su casa de Capital, sería uno de los cabecillas en el comercio de casi 51 kg de marihuana que policías de Drogas Ilegales secuestraron en un taxi al chofer Leandro Oliva (32) el pasado 16 de junio en Capital. Aranda tenía prisión domiciliaria, igual que la presunta cabecilla, Marisa Robledo (44), detenida en su casa de Chimbas. Ayer, el comisario general jefe del D-5, Ariel Rothis, ofreció una conferencia de prensa en la que divulgó quiénes son los otros sospechosos ya indagados por el juez Federal Leopoldo Rago Gallo. Son, un interno del Penal de Chimbas, Rodolfo ‘Fredy’ Carrizo (45), su pareja Ivana Gómez (42) y el penitenciario Jonathan Molina (37) que -se sospecha- ingresaba la droga en la cárcel para su venta. La otra detenida es Valeria Paz (40), informó el comisario Rothis.