A la hora de instalarse en ese lugar sabían de los riesgos que corrían. "Desde el primer día lo supimos porque es una zona jodida. Es un riesgo que asumimos, sabíamos que nos iba a pasar", afirmó un resignado Miguel Arredondo (24), dueño del local junto a su amigo Ángel Massud (24).
Ese pesaroso presentimiento finalmente se cumplió, cinco meses después de abrir ese kiosco al que hace dos meses le sumaron el servicio de Pago Fácil, ubicado en República del Líbano 990 (O), metros al Este de Juramento, en Rawson. Fue durante la noche del último jueves, alrededor de las 20.30, cuando en menos de 20 segundos tres ladrones armados les llevaron más de $70.000 en efectivo.
"Estábamos mirando unas cosas en la computadora cuando se metieron dos tipos. Llegaron en una moto y otro se quedó afuera esperando. Estaban encapuchados, tenían cuelleras, cascos, re tapados. Uno de ellos tenía un arma larga, parecía una tumbera", relató Massud.
El golpe fue audaz: sin vueltas, los encañonaron y les pidieron el dinero. "Entrá, sacá la plata y andate", le dijo Arredondo a uno de los ladrones. El sujeto entonces ingresó al sector donde funciona el Pago Fácil y sustrajo los $70.000 de la recaudación de esa tarde, que estaban en una caja registradora. Mientras, el otro exigió la plata de las ventas del kiosco, unos $300 que los propietarios entregaron sin resistencia.
Habían pasado cerca de 20 segundos y los delincuentes ya salían del local. Velozmente se subieron a la moto que conducía el otro cómplice y huyeron por Juramento en dirección al Norte, indicaron los damnificados, quienes inmediatamente llamaron a la Policía.
"Uno siente indignación, pero también te queda mucho miedo. Que venga un desconocido y te apunte, olvídate…", sostuvo Massud. "Ya teníamos planeado poner cámaras y, después de esto, lo haremos cuando antes. También tenemos pensado tomar otras medidas, como cerrar antes en la noche", agregó su socio.
La denuncia fue radicada en la seccional 24ta, desde donde iniciaron una investigación para tratar de dar con los ladrones.