La decisión causó sorpresa y también enojo. Sorpresa, porque hasta ahora en Tribunales no recuerdan antecedentes de una persona que de marcha atrás con una de las opciones más favorables para el acusado de un delito: la probation. Esta salida, implica la suspención del juicio a cambio de una reparación económica simbólica del daño causado y trabajos comunitarios, con la valiosa posibilidad de quedar sin la mácula del antecedente en la planilla prontuarial. Y enojo, entre los otros imputados y sus defensas, porque quienes desistieron de la probation y por escrito pidieron expresamente ir a juicio, son dos de los acusados del megafraude millonario con casas del IPV que, entre marzo de 2009 y abril de 2010, dejó un tendal de damnificados: al menos 200 familias.
Según fuentes judiciales, el enojo se debe a que creían que el desistimiento de Marcos Barragán y su mamá Miriam Quiroga, implicaba que todos deban ir a juicio como suele ocurrir en el proceso abreviado, cuando uno de los sospechosos no acuerda esta salida. Y también porque un juicio común, implicará ventilar públicamente cómo fue la fraudulenta maniobra.
En Tribunales aseguran que como no es un juicio abreviado, la resolución que podrían tomar en la Sala I de la Cámara Penal es hacer un debate oral y público contra Barragán y su mamá, y aplicar probation a los otros imputados. Aunque los jueces Silvia Peña Sansó, Juan Carlos Caballero Vidal (h) y Raúl José Iglesias, también pueden rechazar el pedido de probation de los otros imputados, Carlos Alberto Albornoz (sindicado como cabecilla), Pedro Roldán y Alejandra Dragui, indicaron los voceros.
-¿Por qué pidieron la probation y luego desistieron?, preguntó este diario al defensor de Barragán y su madre, Juan Pons.
-’Fundamentalmente porque mi cliente cliente y su madre se consideran absolutamente inocentes. Es más, él ha perdido dinero, está acreditado, llegó con una camioneta Ford Ranger y dinero, y con motivo del juicio perdió todo. No pueden decir que Barragán se compró un par de zapatos con este tema.
En cambio el que adquirió bienes, Toyota Hilux, mantenía un equipo de ciclismo, etc, era Albornoz’.
-¿Por qué asegura que son inocentes?
-’Primero, porque se los ha procesado en base a una mentira del Gobierno de que únicamente se entregaban casas por sorteo. Luego de este hecho se ha visto que no es cierto, un ejemplo es el caso de los concejales de Angaco.
Y segundo, porque no investigaron la estructura organizativa del movimiento, en la cual Barragán y la madre no tenían poder de decisión, no manejaban dinero ni nada. El que manejaba todo era Albornoz’, dijo Pons.
El sonado megafraude estalló en abril de 2010, con decenas de denuncias de gente que entre $7.000 y $20.000 o vehículos por una casa del IPV que nunca les dieron. El principal cabecilla, Carlos Albornoz, dirigía el ‘Movimiento Agropecuario Provincial’, en Rawson, y es a quien apuntan como quien prometía las casas por sus ‘contactos oficiales y en el IPV’.
