El juez Agustín Juan Lanciani (Segundo Juzgado de Instrucción) desligó con un sobreseimiento a ocho ex directivos de la mutual del personal de la UNSJ, por el presunto delito de administración fraudulenta en la entidad que les atribuían en una denuncia cuatro afiliadas, dijeron fuentes judiciales. En su fallo (que no está firme), el magistrado respaldó los dichos de los ex dirigentes aunque tildó de "negligente" su gestión, pero no delictiva. Y a través de una nueva pericia contable que ordenó, volvió a poner en duda la actuación del ingeniero Félix Tellechea, quien era asesor de la mutual y desapareció el 28 de setiembre de 2004, dos días antes de que los ahora sobreseídos lo denunciaran por un sobrepago de honorarios a su favor.
"Lo grave y contradictorio de todo ésto es que por un lado un juez (Leopoldo Zavalla Pringles) puso en duda nuestra honorabilidad y que con las mismas pruebas otro magistrado (Lanciani) ponga al descubierto que nuestra denuncia es real y demostrara acabadamente que no mentíamos", dijo ayer Miguel Del Castillo quien, en 2003, heredó la presidencia de la mutual de Luis Moyano, también sobreseído.
Los otros desligados por Lanciani son quienes eran secretario, Eduardo Oro, tesorero Eduardo Luis Alonso, y los ex integrantes de la junta fiscalizadora hasta octubre de 2005, Jorge Ruíz, Roberto Pérez, Delfín Lozano y Salvador Grégori. En la denuncia, les atribuían -entre otras sospechas- ser parte del delito atribuido a Tellechea por no controlarlo ni denunciarlo a tiempo; firmar cheques sin fondos o tener un ítem "deudas" por $635.000 sin ninguna especificación. Pero el juez evaluó la denuncia punto a punto y consideró que los denunciados no cometieron delito, dijeron las fuentes.
Cuando Tellechea fue denunciado, el juez Zavalla Pringles hasta ordenó su captura, pero luego lo sobreseyó (un juez civil también lo declaró presuntamente muerto) y procesó a sus ocho denunciantes. Sin embargo, la Sala I de la Cámara Penal anuló este último fallo por falta de fundamentos y cuando el caso pasó al juez Lanciani, este magistrado ordenó una nueva pericia caligráfica y otra contable, clave en su fallo, encargada a los doctores Paola Ginestar de Benavidez y Pablo Garay.
Según el expediente, Tellechea era el responsable del manejo informático de la mutual, quien confeccionaba las planillas para el pago de los empleados (18) y quien llevaba al banco Credicop el listado para acreditar haberes a cada uno.
Pero los expertos contables informaron que entre 2002 y 2004, el banco giró a la cuenta de Tellechea (con firmas falsas de presidente y tesorero) importes superiores a los que figuraban en la planilla que quedaba para la mutual (por ejemplo, $1.200 en lugar de $600), aunque en ambos documentos la suma final reflejaba el mismo monto. Es más, los peritos concluyeron que en un momento cuando en la mutual eliminaron a Tellechea de ese listado, igual figuraba en la nómina del banco y siguió cobrando, dijeron las fuentes.