El chico de 17 años detenido por el terrible crimen a golpes de un bebé de 1 año y 3 meses el jueves de la semana pasada, se negó ayer a dar su versión de los hechos ante el juez de Instrucción Guillermo Adárvez, informó ayer su defensor oficial Mario Vega.
De todos modos, ante los medios el menor alcanzó a culpar a la madre de la criatura, Johana Castro (22, con antecedentes por prostitución), con quien él mantenía una relación amorosa. Hoy, la mujer podría declarar ante el juez.
El único que habló hasta ahora es un hermano del menor, Jonathan Flores (26). También culpó a Castro y aseguró que el día previo al crimen, el miércoles, salió alrededor de las 14 a ver a su mujer internada en el hospital por la pérdida de su bebé. Y que al volver, a las 2 o 2.30 del jueves, se topó a la criatura golpeada, preguntó qué le pasó y le hablaron de un accidente cometido por su propio hijo menor contra el bebé. Precisó que entonces lo cuidó con su hermano, hasta que llegó la madre y lo halló muerto. En ese relato, quien aparece el mayor tiempo al cuidado del niño es el menor imputado.
El bebé murió desangrado por una paliza que terminó destrozándole el hígado.

