El cuerpo de uno de los ancianos que desaparecieron la semana pasada cuando viajaban a Jesús María desde San Juan fue hallado a 35 kilómetros de Quilino en "plena Salinas Grandes". Creen que se habrían desorientado. El cadáver de Rosalía Arbó (72) fue hallado este lunes a 35 kilómetros al norte de la localidad de Villa Quilino, "en plena Salinas Grandes", informaron fuentes oficiales de la investigación.
El cuerpo de la mujer que viajaba junto a su esposo Ramón D’ Virgilio estaba dentro del auto Renault 9 patente TGP 757. Los investigadores señalaron que no hay datos acerca del paradero del hombre y que, en principio, el cadáver de Arbó no presentaba lesiones.
El fiscal Martín Bertone viajó junto a fuerzas especiales a la zona de Piletas o Baños de Unquillo, distante a 8 kilómetros del límite con la provincia de Catamarca y desde allí dirigió la investigación hasta que finalmente se realizó el hallazgo. Según las fuentes, en la jornada las temperaturas en la salina superan los 45 grados y la búsqueda para tratar de encontrar a D’ Virgilio continúa.
"Nos convocamos junto a familiares, bomberos, policías, GES, canes y aproximadamente al mediodía se pudo dar con el vehículo el cual estaba en una zona inhóspita, zona de las salinas. Se da con el vehículo y a un costado afuera el cuerpo de la señora, es muy difícil el acceso, al haber tomado ese camino han estado muy desorientados y llegando a ese punto el vehículo debe haberse quedado sin combustible", dijo el comisario mayor Félix Quinteros en diálogo con la prensa.
"El cuerpo a simple vista no presenta ningún tipo de lesión, el cuerpo estaba en estado de descomposición", dijo Quinteros a Telenoche Doce. "Hay detalles como por ejemplo que encontramos restos de yerba al costado del vehículo, un sinónimo que han estado perdidos y sentados tomando sombra en ese sector del vehículo. Caminando no tiene nada cerca, es todo salina y alrededor se hicieron playones de salinas y monte espeso, el personal quedó agotado, la temperatura que marcaba una camioneta era de 45 grados", añadió.
Los abuelos habían partido el jueves 12 desde San Juan con rumbo a Jesús María, donde los esperaban parientes. Alrededor de las 19.30 avisaron que estaban en Cruz del Eje. En esa ciudad fue la última vez que los vieron. Fuentes de la investigación indicaron que un playero de una estación de servicio de Cruz del Eje fue el último que conversó con la pareja y que el hombre preguntó por un camino, luego partieron y nada se supo de ellos hasta este lunes.