Este viernes, bajo el sistema de Flagrancia, se resolvió mediante juicio abreviado condenar a Rodrigo Javier Castro Montaño a 10 meses de prisión de cumplimiento efectivo, que unificada con condena condicional anterior de 8 meses, totaliza una pena única de 1 año y 6 meses de cárcel.

El sujeto fue detenido en las primeras horas del pasado sábado después de ser sorprendido en el interior de un vehículo  del que intentaba robar. Lo que llamó la atención de los uniformados, fue el desparpajo con el que el hombre se dio a la fuga después de esbozar un “¿qué onda?”.

Según informaron desde el Ministerio Público Fiscal, todo sucedió cuando un uniformado que estaba de franco observó a un hombre sospechoso en el interior de un vehículo en calle  Pueyrredón, entre Hipólito Irigoyen (ex San Miguel) y Centenario, en Rivadavia.

Cuando el oficial intentó entrevistarlo y consultar respecto a que hacía allí, el delincuente lo insultó y tras lanzar un “¿qué onda?” escapó corriendo del lugar.

El efectivo de franco, con apoyo de un móvil de la Comunal Rivadavia, emprendió la persecución del joven que finalmente fue alcanzado cuando intentó sin éxito ingresar a la Escuela Provincia de Tucumán.

La investigación determinó que el  Volkswagen Polo era de un agente penitenciario y que Castro había forzado la puerta delantera y trasera, al igual que la cerradura del baúl.