El juez Ernesto Kerman (Sala II, Cámara Penal) ordenó ayer la captura de un hombre al que, el 17 de agosto pasado, condenó a 10 años de cárcel por los abusos sexuales gravemente ultrajantes que cometió contra su propio hijo. Según fuentes judiciales, el juez tomó esa decisión porque la defensa no realizó ningún planteo para reclamar ante la Corte de Justicia para revertir el fallo, que ayer quedó firme.
El acusado tiene 41 años y no se lo menciona para preservar a su hijo. Estaba libre porque pasó poco más de 2 años preso hasta que la Corte entendió que se habían vencido los plazos de prisión preventiva sin sentencia.
Los hechos que llevaron al sujeto al banquillo de los acusados, ocurrieron cuando el niño tenía 6 años y se prolongaron hasta poco antes de que cumpliera 8. Y se denunciaron el 16 de noviembre de 2014. Para la Fiscalía y la Querella, esos episodios habían sido prácticamente una violación contra el niño y pidieron 12 y 14 años de castigo, respectivamente. La defensa, la absolución.