Un changarín calingastino de 55 años fue condenado a 3 años de prisión condicional (sin encierro) por manosear a su hijastra en reiteradas oportunidades cuando ella tenía entre 12 y 14 años, dijeron fuentes judiciales.

El castigo aplicado por el juez Andrés Abelín Cottonaro fue por el delito de abuso sexual simple reiterado agravado por la situación de convivencia y por ser encargado de la guarda de la víctima. Mientras que para el magistrado no quedó probado que el hombre se exhibió obscenamente ante la menor, por lo que lo absolvió de ese delito.

El fiscal coordinador de la UFI Anivi Raúl Iglesias pretendía una condena de 7 años de cárcel para el imputado. En tanto que la defensa, representada por Fabricio Fachinetti, había solicito la absolución. Ahora las partes pueden apelar la sentencia.

El fiscal Raúl Iglesias y la ayudante Julieta Carcelero
El juez Andrés Abelín Cottonaro

El changarín, no identificado para preservar a la víctima, había sido denunciado a fines del año pasado. Según Fiscalía, cuando su hijastra tenía entre 12 y 14 años abusó de ella mediante manoseos, ingresando a su habitación. La menor relató que le decía que quería ser su primer hombre, consta en el expediente.

Además, según el Ministerio Público Fiscal, en una oportunidad ingresó desnudo a la pieza y se exhibió ante la menor, pero ese hecho no quedó acreditado para el juez.

El changarín condenado junto a su abogado, Fabricio Fachinetti.

El ahora condenado transcurrió el proceso judicial en libertad y, al tratarse de una pena en suspenso, continuará libre. Eso sí, pesa sobre él una prohibición de acercamiento a la víctima, por lo que tuvo que irse de su casa, ubicada en la zona de La Isla, en Calingasta.

El hombre, que hace changas como albañil o en las chacras, durante el debate intentó mostrar que era inocente. Este miércoles, cuando le dieron la posibilidad de decir sus últimas palabras, quebró en llanto y expresó que jamás haría una cosa así, menos con alguien de su familia y a quien considera una hija. La defensa deslizó que para la que la denuncia fuera interpuesta intervinieron unos vecinos con los que el changarín se lleva mal.