Tres de los sujetos aparecieron con barbijos, como si se tratara de enfermos o promotores de alguna campaña contra la Gripe A. Pero ni unos ni otros. Había un cuarto que desentonaba, tenía puesta una media en la cara. Eso descartó toda duda, más todavía cuando esos desconocidos sacaron a relucir sus pistolas y revólveres. Los que entraron ayer al mediodía a esa distribuidora de Pocito eran asaltantes, que en segundos encañonaron a cuatro personas en el negocio y a otras dos en la casa contigua. El atraco culminó con las víctimas encerradas en los baños y con la banda escapando con alrededor de 10.000 pesos.

"Me dan ganas de cerrar el negocio y no abrir más. Tengo mucha impotencia y bronca. Este es un negocio familiar, aquí trabajan todos para mantenerlo y resulta que ahora vienen estos cuatro hijos de p… y nos roban", dijo furioso Francisco Ruiz, el dueño de la distribuidora de comestibles y bebidas ubicada en la manzana H del barrio Santa Rita, Pocito.

Fue a las 12:30 de ayer cuando irrumpieron los cuatro sujetos al local comercial. Tres llevaban barbijos. En principio, amenazaron a Yanina Ruiz -hija del dueño-, a su marido Maximiliano Gutiérrez y a dos personas que estaban comprando, según la policía. Al yerno de Ruiz le pegaron, lo mismo que a un cliente.

Dos de los asaltantes luego tomaron por sorpresa a Francisco Ruiz y a su suegra, Josefa Blanes, que estaban dentro de la casa que funcionada al lado de la distribuidora, de acuerdo a datos policiales. La mujer de Ruiz en ese momento no estaba porque había ido a retirar a su nieto de la escuela.

A algunas de las víctimas les quitaron los celulares, efectos personales y también sacaron dinero del negocio y otro tanto que tenía Ruiz, según un uniformado. Se robaron alrededor de 10.000 pesos, confirmó la víctima. Para asegurar la huida, los ladrones encerraron a la hija y al yerno de Ruiz, junto a los dos clientes, en el baño de la distribuidora. El dueño y su suegra también terminaron dentro del baño de la casa.