Secuestro. Los menores habían llevado a la fiesta gran cantidad de bebidas alcohólicas. La Policía arruinó todo.

 

En la madrugada de ayer, la Policía clausuró una fiesta donde habían más de 70 menores (de entre 12 y 17 años) y secuestró gran cantidad de bebidas alcohólicas. El festejo clandestino se estaba llevando a cabo en una casa del Barrio Enoé Mendoza, en Caucete, y para entrar había que abonar $50, dijeron fuentes policiales. A través de las redes sociales, los investigadores se habían enterado de la fiesta. Así, a eso de las 2.30 de ayer policías de civil entraron y constataron, además de que cobraban entrada, que el fondo de la casa estaba repleto de menores. Los mismos fueron trasladados a la seccional 9na y tuvieron que ser retirados por sus padres.