María Bugueño (49) había salido a la puerta de su casa a despedir a una parienta que le dejaba a su pequeño hijo para participar en el festival carnavalero en la Villa El Salvador, Chimbas. Habían pasado unos minutos de la 1 y la mujer se disponía a cerrar la puerta y ponerle el pasador, cuando la sacudió un disparo en el costado derecho de su abdomen. En medio de la desesperación, sus hijos llamaron a la ambulancia mientras la recostaban y trataban de hacer lo que podían. Pero la ambulancia no llegó. Les dijeron que no podían avanzar más allá de la Benavídez y que, si podían, la acercaran hasta el cruce de Benavídez con Mendoza, pero cuando llegaron a ese lugar no había ningún móvil sanitario. Por eso María debió ser trasladada hasta el hospital Rawson en el auto de un vecino, explicó ayer Pablo, uno de los cuatro hijos de la víctima.
Allí, les dijeron que las cosas no estaban del todo bien, pues la bala había dañado el hígado y otros órganos vitales. Anoche seguía internada en Terapia intensiva.
‘El comentario de los vecinos es que el tiro vino de una pelea entre los murgueros. De mi casa no había ido nadie porque no nos gustan esas cosas y pasó que la recorrida que hacían terminaba justo en la calle de mi casa. Estamos rogando que mi mamá salga bien de todo esto’, dijo Pablo.
Esa calle es la Entre Ríos y la casa de María está situada unos metros al Sur de Neuquén, en Villa El Salvador, justo por donde desfilaron, de Oeste a Este, los participantes de la fiesta.
En la Seccional 17ma que dirige el comisario Rodolfo Andrada, habían detenido ayer a cuatro sujetos, incluido el supuesto autor del disparo que dejó muy grave a María, un joven de apellido Tapia que participaba en la murga de la Villa Observatorio, dijeron fuentes policiales.
Los problemas con violentos en los carnavales chimberos siempre ocurrieron. De hecho, un rato antes el ataque a Bugueño, los mismos policías habían apresado a otro sujeto que portaba un revólver calibre 32, sin balas.
También sustrajeron un auto
La celebración del carnaval chimbero incluyó también otro episodio delictivo que hasta ayer estaba sin resolución: la sustracción de un auto Fiat Regatta. Según la Policía, ese vehículo es de Erica Infante, que se domicilia en el barrio Los Pinos, en Chimbas. La versión es que la mujer llegó en el rodado hasta la esquina de Salta y Neuquén, en Chimbas, estacionó y asistió a los festejos. Los problemas para ella surgieron cuando se quiso ir: a la 1,40 de ayer fue hasta el lugar donde estacionó y el auto ya no estaba.