El ladrón entró resuelto. Apenas traspasó la puerta del locutorio, el curioso sujeto de capucha, cuellera y anteojos para sol tomó por la espalda a la amiga de la encargada del lugar y le puso una navaja en el cuello. "Dame la plata", le ordenó a la empleada de ese comercio situado en el cruce de Diagonal Sarmiento y Juan José Bustos, en Caucete. Pero entonces la joven reducida a punta de cuchillo se puso a gritar, y su amiga arrancó de un manotazo los anteojos y la cuellera del delincuente: "¡Qué hacés!", requirió molesto, antes de decidirse con dos puntazos que dieron en el homóplato izquierdo de la empleada y de milagro no le provocaron lesiones graves, dijeron ayer fuentes policiales.
Tras el ataque, ocurrido a las 21,15 del viernes, el delincuente cargó la caja registradora con unos 30 pesos y huyó a pie. Enseguida un vecino encontró la caja tirada con algunos billetes y monedas. Y enseguida también dos patrullas de policías cauceteros al mando del comisario Dionisio Pastén buscaban y detenían oculto en una finca al sospechoso. Era un mendocino de apenas 15 años, de visita en Caucete, que el jueves pasado había insistido con entrar al mismo locutorio tras el horario de cierre.

