Un joven sanjuanino de 19 años, será enjuiciado por un tribunal federal de Capital Federal, acusado de haber obligado a su propia novia, también de San Juan y de 18 años, a prostituirse. El delito que le atribuyen a ese joven, identificado por sus iniciales, C.L., y su apodo ‘Yayo’, es trata de personas agravado, informó el diario Infobae.
Según el diario online, ambos son de un barrio marginal cercano a la capital sanjuanina, y decidieron unir sus rumbos en 2014 cuando atravesaban situaciones complicadas: ella peleada con su madre a causa de sus problemas de adicción y rebeldía. Él, con entradas en la Policía y una causa por robo agravado.
El 13 de agosto del año pasado ambos llegaron a Buenos Aires supuestamente a visitar a los papás de ‘Yayo’, pero ese mismo día el joven la puso a trabajar en la Calle Garay, la principal de la zona roja de Constitución, Capital Federal.
El negocio era simple: ella cobraba $150 por turnos de 45 minutos. Y con la plata que ganaba pagaba una habitación en el ‘Hotel Colin’ y también unos $200 diarios a una mujer que la custodiaba, y que resultó ser una expareja del padre del novio proxeneta, un sujeto identificado como ‘Tiburón’, que también supo ser proxeneta, incluso de su propia mujer, según el periódico.
Esa sospechosa, también está presa y será enjuiciada como partícipe necesaria de la explotación sexual de la joven sanjuanina, publicó Infobae.
El caso tiene ribetes dramáticos: cada vez que ‘Yayo’ se iba, por las noches, ella quedaba encerrada. También era obligada a mandar mensajes falsos sobre el ‘buen pasar’ que tenía en Capital Federal, consta en el expediente. Y por si fuera poco, era amenazada y golpeada con frecuencia, dijeron fuentes judiciales.
De todos modos, en la causa hay situaciones que serán complicadas de resolver por el tribunal, pues le hicieron escuchas a ‘Yayo’ ya preso en la cárcel de José C. Paz. Y ahí descubrieron que ella lo llamaba y parecía arrepentida, pues le decía que su mamá la tenía encerrada, que estaba embarazada de él (algo que es mentira) y ambos decían amarse y extrañarse.
Sin embargo en la causa, constan las declaraciones en Cámara Gesell de la chica en la que confirma las tormentosas situaciones que atravesó desde que resolvió irse a Buenos Aires con su novio.