Tres presuntos cuatreros fueron apresados días atrás por efectivos de la brigada de calle de la Comisaría 9na, con apoyo de la Unidad Rural 1, acusados de robar y faenar 25 vacas pertenecientes a una familia que vive en Las Chacras, una zona ubicada a unos 40 km al Norte de Marayes, en Caucete. Fuentes policiales indicaron que en los allanamientos realizados en las viviendas de los sospechosos incautaron un camión donde cargaban a los animales, dos rifles con cartuchos y que hallaron cueros de vacas faenadas en el campo de donde los sustraían. Hay dos prófugos, precisaron.

Roberto Marín, uno de los damnificados, contó ayer a este diario que desde hace unos 45 días los animales que tiene con su familia en Las Chacras empezaron a desaparecer: ‘se perdían de a dos o tres vacas y creíamos que se los había comido algún puma, pero después nos enteramos que no era así’, dijo Marín.

La familia realizó la denuncia en la Seccional 9na y luego de una investigación y datos de testigos, los pesquisas al mando del comisario Jorge Sánchez identificaron a los supuestos cuatreros. Con orden de la juez María Inés Rosselot, el oficial Juan Petkovic y los cabos Ariel Zeballos, Rodolfo González y Daniel Peñaloza allanaron tres viviendas en Caucete: en el Bº Guayaguás apresaron a Juan Martínez (30) porque sería el sujeto que ponía su camión marca ‘Man’ para trasladar los animales que robaban o faenaban en Las Chacras, informaron fuentes policiales.

Los efectivos también allanaron la casa de Benito Ferreyra (50), un puestero que vive en Nikisanga y que es vecino de los Marín. Allí encontraron dos rifles calibre 22 con 10 cartuchos que serían los que utilizaban para matar el ganado, explicaron en la Fuerza.

Por último la Policía detuvo a Omar Velázquez (40) en su vivienda de calle Aberastain y Galbarini. Este sospechoso sería quien se encargaba de comercializar la carne, informaron en la Seccional 9na.

‘Los 25 animales valen como $2.000 cada uno. Ahora tenemos miedo porque han venido parientes de estas personas a amenazarnos, pero la Policía ya sabe de esta situación’, dijo Ariel Marín, otro de los damnificados.