Los jueces Andrés Abelín, Federico Rodríguez y Eugenio Barbera (h) condenaron ayer a un jornalero de 63 años, a 11 años de cárcel porque consideraron probado que sometió a distintas violaciones (prácticas de sexo oral) a una nena (tenía 11 años) que lo respetaba como su abuelo, porque es pareja de la abuela de la menor. La decisión de los magistrados representó un segundo castigo para otro abusador de esa niña, ya que un hermano de este sujeto había recibido 2 años de prisión en suspenso (sin encierro) por haberla manoseado, dijeron fuentes judiciales.

"Soy inocente, nunca le hice nada", dijo el acusado, que sufre diabetes y está preso desde febrero pasado en la cárcel de Chimbas.

El hecho que cerró ayer con una sentencia, había sido denunciado el 17 de diciembre pasado por una pastora de la religión evangélica, que administraba un merendero donde la niña iba con sus hermanitos.

Ayer, en sus alegatos, el fiscal Roberto Mallea y la ayudante fiscal, Andrea Insegna (UFI Anivi) habían insistido en que el jornalero reciba 13 años de cárcel, por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado, por la convivencia y por estar al cuidado de la menor, considera "altamente vulnerable", porque había ido a parar a la casa de su abuela luego de que oficialmente se decidiera quitarle la tutela a su propia madre. El defensor oficial, Alejandro Martín García, había pedido la absolución de su defendido. Ahora, podrá impugnar la sentencia.