Merodearon en una casa hasta que vieron la oportunidad de meterse hasta el fondo y robar una moto, que estaba con la llave puesta pero con una rueda pinchada. En ese estado la llevaron a una gomería para hacerla parchar y luego partieron a una estación de servicio para cargar combustible. Los pesquisas de la seccional 17ma y la Brigada Norte sospechan que la última maniobra en el itinerario de esos dos sujetos, el domingo pasado en el chimbero barrio Luz y Fuerza I, terminó con el robo del bolso con $35 y documentos de la enfermera Romina Castro (22), cuando era acompañada de su novio Marcos Arancibia (24) a tomar el micro para ir a trabajar. Lo trágico de ese ataque fue el letal disparo en el pecho contra Marcos, cuando amagó intervenir para que no siguieran golpeándola en el piso: Romina se había caído cuando él le dijo que corrieran para evitar el asalto. De los detenidos sólo trascendió que viven en la Villa Cobos y el barrio Independencia, en Chimbas. Pero al revisar sus casas no encontraron evidencia fundamental que los complicaría, como la pistola usada en el crimen, la moto robada, una vestimenta señalada por los testigos, el bolso o alguno de los objetos sustraídos a la víctima.
De todos modos las sospechas contra esos jóvenes siguen intactas, porque uno de ellos se había cortado el cabello, señal indisimulable para los investigadores de que no quiere ser reconocido, dijeron ayer fuentes policiales.
Los detenidos fueron señalados con nombre y apellido por los dueños de la moto robada, porque los conocen. Esos denunciantes los describieron en su aspecto físico y con la ropa que usaron. Y esos datos coinciden con los que aportaron en la gomería, en la estación de servicio y la pasajera de un remís que los vio instantes antes del crimen en el barrio Luz y Fuerza I, precisaron los voceros.
‘Todo indica que pueden ser ellos, pero las pruebas mandan y hay que reforzar la hipótesis con más evidencia’, dijo ayer un jefe policial.
TERCER DETENIDO
Otra línea de investigación, encarada por policías de Homicidios, terminó con la detención de un sujeto por su posible vinculación al crimen de Arancibia por la moto que usaba. Este sospechoso, igual que los otros dos, también depende de las pruebas. En este caso, al sujeto lo complica la tenencia de una moto similar a la usada por los homicidas.

