Hay dos versiones: una, que el problema vino porque constantemente molestan a la hija de un vecino; y la otra, que la disputa se originó porque la novia de un joven tenía un amorío con otro chico del barrio. La cuestión es que arreglaron sus cuentas entre vecinos el sábado a la noche y corrió sangre dentro de ese barrio de Rawson. Los que perdieron fueron un joven, a quien le metieron un balazo en una pierna y un cuchillazo que le perforó un pulmón, y su hermano al que le tuvieron que hacer 8 puntos de sutura por un golpe.
El más lastimado fue Juan Ezequiel Reyes (20), que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente en el Hospital Rawson a raíz de ese puntazo que le afectó el pulmón izquierdo, aunque está fuera de peligro, indicó su familia. El otro herido es Juan Mauricio Reyes (21), al que le partieron la ceja izquierda supuestamente con el culatazo de un revólver, según las versiones. Los policías de la Subcomisaría Ansilta, al mando del oficial principal Eduardo Tejada, detuvieron a Daniel Mercado (43), vecino de los Reyes en el barrio Franklin Rawson (ubicado en calle Doctor Ortega), como uno los agresores.
Mercado habría dicho que la pelea comenzó porque los chicos Reyes siempre le molestan e insultan a su hija adolescente. Del otro lado dijeron que el problema se originó, en realidad, porque la novia del hijo de Mercado estaría teniendo un romance paralelo con uno de los Reyes. Eso desembocó en un cruce entre los jóvenes y la posterior intervención de Mercado, según las versiones.
No se sabe cuántos participaron de la gresca, ocurrida el sábado a las 21. Supuestamente Mercado agredió primero a Juan Mauricio Reyes, rompiéndole la ceja. Entonces su hermano Ezequiel se metió, pero en el tumulto recibió el disparo en la pantorrilla de la pierna izquierda y el puntazo en el costado del tórax. Después arrojaron piedras contra la casa de los Reyes en la manzana A de ese barrio. Los policías de la Subcomisaría del Bº Ansilta y del Comando Radioeléctrico tuvieron que disuadir a los violentos, ahí detuvieron a Mercado y secuestraron un cuchillo. En eso también apareció el padre de los Reyes, que trasladó a sus hijos heridos en auto al hospital. La Policía seguía buscando el revólver que utilizaron.