’No hay que dejar que los delincuentes ganen. Nosotros no tenemos mucho dinero, pero no nos achicamos a los tipos. Solamente defendí a mi familia y lo poco que tenemos’. Eso dijo Miguel Ángel Acuña, un comerciante de 59 años, luego de resistirse ayer junto a su mujer y un hijo de 19 años al feroz ataque de dos ‘motochorros’ armados en su despensa en Santa Lucía. Los malvivientes simularon ser clientes y atacaron a la esposa de Acuña. Enseguida, el hombre fue a defender a su mujer y se trenzó a golpes con uno de los ladrones. A la pelea se sumó el hijo y cuando los malvivientes escapaban, uno disparó y el tiro casi le arrancó al comerciante parte de un dedo de su mano izquierda.
El violento ataque ocurrió ayer a las 9 en la casa que habita Acuña con su familia en avenida Argentina, en la Colonia Gutiérrez, Santa Lucía. A esa hora, su esposa Cristina estaba sola en el negocio cuando llegaron los ladrones y pidieron cigarrillos. ‘Mi señora se dio vuelta para tomar los cigarros y ahí sacaron las armas y empezaron a pegarle en la cabeza. Yo estaba en otra parte de la casa y cuando escuché sus gritos, fui a ayudarla’, dijo Miguel Ángel.
El hombre agarró a uno de los ladrones y comenzaron a pelear, mientras que su mujer se defendía del otro sujeto. Acuña y uno de los ladrones cayeron al piso y allí apareció su hijo Maximiliano (19). ‘Mi hijo vino en calzoncillos a ayudarnos y le pegó por detrás al tipo que tenía encima’, agregó el comerciante.
En esa defensa de su padre, el joven le pegó una patada a una vitrina y los vidrios le lastimaron el pie izquierdo. En ese momento, uno de los delincuentes se fue hacia la calle, donde habían dejado la moto. ‘Con mi hijo le pegábamos a uno de los tipos y el otro se fue a la calle, pero volvió. Me paré y me apuntó, pero le manoteé el arma y ahí es cuando me disparó’, precisó Miguel Ángel.
El disparó le provocó una fractura expuesta en el dedo anular y los ladrones escaparon sin robar nada. ‘Ni sentí el dolor. Cuando me di cuenta de la herida, vinimos en nuestro coche al hospital’, precisó el comerciante.

