Un subteniente de la Policía bonaerense fue asesinado ayer cuando entró a una casa de la localidad de Villa Luzuriaga para evitar un robo y fue baleado por delincuentes que mantenían amenazados a un matrimonio y a sus dos hijos.

El subteniente asesinado fue identificado como Marcelo Luis Pascua (43), casado y con dos hijos, quien se convirtió en el séptimo efectivo asesinado en cumplimiento del deber en lo que va del año en Buenos Aires.

El hecho ocurrió cerca de las 6.30 de ayer dentro de una casa ubicada en la calle Entre Ríos 43 de Villa Luzuriaga, en el partido de La Matanza.

Todo comenzó cuando el dueño de casa, Ernesto Klekoc, salía a bordo de una camioneta Renault Kangoo para dirigirse a su trabajo y fue sorprendido por tres delincuentes armados que lo obligaron a entrar a la vivienda en la que se hallaba durmiendo su familia.

Aparentemente, un vecino observó el momento en el que los malvivientes sorprendían al hombre por lo que llamó de inmediato a la policía.

Según las fuentes, el subteniente Pascua, junto a otro subteniente de apellido Pérez, llegaron en un patrullero con las sirenas encendidas. Ingresaron por un pasillo a la casa, pero desde adentro fueron recibidos a los tiros por los delincuentes que, ya alertados, los esperaban escondidos detrás de una pared.

Según los investigadores, Pascua recibió dos balazos en el pecho y murió antes de que pudiera ser atendido en una clínica.

Los pesquisas intentaban establecer por qué el policía asesinado no llevaba puesto su chaleco antibalas al momento del tiroteo y trataban de dar con el paradero de los ladrones.